Termoplásticos: precauciones que debes tener en su manejo

Las tuberías termoplásticas cada vez se utilizan más en multitud de sectores y es preciso tener precauciones a la hora de su manipulación para evitar posibles accidentes.

En este post os explicamos los principales cuidados que se debe tener con los termoplásticos en procesos de soldadura para conseguir los mejores resultados y siempre con todas las garantías de seguridad.

Soldaduras de termoplásticos

Soldaduras de termoplásticos

Cualquier proceso de soldadura entraña unos riesgos que el profesional debe conocer perfectamente para aplicar las mejores soluciones y trabajar siempre con total seguridad. Las soldaduras con PVC o PP son muy habituales ya que son materiales que se utilizan en muchos sectores, sin embargo, no todos los profesionales conocen los riesgos de manipular estos plásticos y muchos no saben distinguir con claridad un termoplástico de otro para saber qué precauciones tomar.

Precauciones con los termoplásticos

Los termoplásticos están compuestos por polímeros que, cuando se exponen al calor, se ablandan y una vez que se enfrían vuelven a recuperar su forma original. Dentro de los termoplásticos, los más utilizados son el PVC (cloruro de polivinilo), PE (polietileno), PP (polipropileno) y PS (poliestireno). Los profesionales deben conocer muy bien cada material y sus características a la hora de trabajar con ellos. Si no se está seguro, lo mejor es preguntar a un experto o al distribuidor del termoplástico, aunque no siempre es posible. 

En la pieza suelen aparecer unas letras para indicar qué tipo de plástico es. Estas son las más habituales:

  • PP es polipropileno.
  • PET o PETE es polietileno tereftalato.
  • LDPE es polietileno de baja densidad.
  • HDPE es polietileno de alta densidad.
  • PS es poliestireno.
  • V/PVC es vinílico o cloruro de polivinilo.

Si la pieza no tiene ningún distintivo, la manera de saber qué tipo de termoplástico tenemos entre manos es hacer un test de soldadura y, dependiendo del tipo de combustión, el humo y otros factores, podremos saber qué plástico es y si es compatible con lo que queremos soldar. Sin embargo, no está de más preguntar a una persona más experimentada en termoplásticos para estar seguros de que la soldadura puede llevarse a cabo sin ningún problema.

Termoplásticos: precauciones que debemos tomar

Una vez identificados los plásticos con los que vamos a trabajar es el momento de saber los riesgos que entraña cada uno y poner en práctica las precauciones recomendadas a la hora de trabajar con ellos.

Termoplásticos: precauciones que debemos tomar

Si seguimos las indicaciones de seguridad establecidas por el fabricante, no deberíamos tener ningún problema de toxicidad, aunque, por supuesto, debemos utilizar siempre los equipos de seguridad para protegernos durante la soldadura, como gafas, guantes, filtros, mascarillas, etc. Vamos a ver con más detalle las precauciones que debemos tomar con cada termoplástico:

PVC (Cloruro de polivinilo)

Si no se emplean aditivos no presenta ningún problema debido a su gran estabilidad química. Con temperaturas superiores a 170ºC el material podría degradarse y emitir monóxido de carbono, ácido clorhídrico  y carbónico. Si la temperatura supera los 300ºC podría desprender benceno.

PE (Polietileno)

No presenta peligros reseñables a la hora de manipularlo, sin embargo se puede despolimerizar a temperaturas superiores a los 200ºC. En el caso de superar los 350ºC pueden aparecer concentraciones de gases como el butileno. También debemos tener cuidado con los disolventes que utilicemos si trabajamos con temperaturas superiores a 60ºC.

PP (Polipropileno)

Hay un riesgo muy bajo al trabajar con este termoplástico, sobre todo porque su degradación empieza cuando se llega a temperaturas superiores a los 300ºC. Normalmente se trabaja con temperaturas mucho más bajas, pero si alcanzamos esos límites, el material puede desprender hidrocarburos alifáticos.

PC (Policarbonato)

Este termoplástico es similar al PP, ya que comienza a degradarse con temperaturas superiores a los 300ºC. Debemos tener mucha precaución si se llega a esa temperatura porque la pieza puede desprender cloruro de metileno, un potente narcótico con efectos potencialmente cancerígenos.

Aparte de las características de cada plástico, hay que tener en cuenta que el operario podría tener alergia a algún material termoplástico o a cualquier sustancia que pueda emitir durante el proceso de soldadura. De ahí que haya que tomar más precauciones de las habituales y consultar con un médico para saber si el profesional puede manipular o no determinados plásticos.

Otro apunte importante es que no todos los termoplásticos son compatibles, sobre todo por diferencias de flexibilidad, dureza, resistencia o incluso por el color de ambas piezas. Si queremos conseguir una soldadura de calidad y resistente debemos estar seguros de la compatibilidad de los plásticos que queremos unir y las posibles dificultades que vamos a tener durante la soldadura. 

Desde Agruquero, nuestra recomendación es que consultes con especialistas en termoplásticos para saber si vas a tener dificultades con la soldadura que quieres hacer, las precauciones que debes tomar y los trucos para conseguir el resultado que deseas. Contacta con nosotros para resolver cualquier duda o pregunta y para descubrir nuestro amplio catálogo de termoplásticos para todo tipo de trabajos. También puedes visitar nuestra tienda para verlos in situ. ¡Te esperamos!